Para atraer una rata y eliminarla, es fundamental identificar sus rastros, como heces u orina, y colocar trampas estratégicamente.
Las ratas son atraídas por alimentos como queso, nueces o mantequilla de maní, por lo que se pueden utilizar como cebo en las trampas.
Se recomienda revisar regularmente las trampas para verificar si se ha capturado alguna rata y reemplazar el cebo cuando sea necesario.
Es importante sellar posibles puntos de entrada en el hogar, como grietas en las paredes o tuberías, para evitar que otras ratas puedan ingresar.
En caso de una infestación severa, es aconsejable contactar a un profesional en fumigación y control de plagas para una solución efectiva y segura.