Las termitas son insectos sociales que se alimentan de madera y son una de las principales plagas en el control de plagas.
Su presencia puede ser devastadora para estructuras de madera, ya que pueden debilitar seriamente las construcciones.
Las termitas son capaces de pasar desapercibidas durante mucho tiempo, lo que hace que su control sea crucial para evitar daños mayores.
Los gusanos, por otro lado, son larvas de insectos que se alimentan de materia orgánica en descomposición, como restos de comida o plantas muertas.
El tratamiento de termitas y gusanos generalmente involucra técnicas de fumigación y control químico especializado para erradicar la plaga de manera efectiva.