Las termitas son una amenaza común en muchas regiones durante la primavera y verano. Su presencia puede causar daños graves en estructuras de madera.
Durante la primavera, las termitas comienzan a reproducirse y formar nuevas colonias, lo que aumenta la probabilidad de infestación en hogares y edificios.
Es importante realizar inspecciones periódicas en la propiedad para detectar posibles signos de termitas, como túneles de barro, excrementos o alas caídas.
Si se identifica una infestación de termitas, es fundamental actuar rápidamente para evitar mayores daños estructurales y costosos tratamientos de control de plagas.
Mantener una buena ventilación y reducir la humedad en áreas propensas puede ayudar a prevenir la infestación de termitas durante la temporada alta.