El monitoreo de plagas es una técnica fundamental en el control integrado de plagas que permite detectar la presencia de insectos, roedores y otras plagas de manera temprana.
Mediante el monitoreo constante de plagas, es posible identificar patrones de comportamiento de las mismas y anticiparse a posibles infestaciones, lo que contribuye a la adopción de medidas preventivas eficaces.
El monitoreo de plagas se realiza a través de trampas, señuelos y otros dispositivos específicos que permiten recopilar información sobre la presencia y la cantidad de plagas en un área determinada.
La información obtenida a través del monitoreo de plagas es crucial para establecer estrategias de control personalizadas, que minimicen el uso de pesticidas y promuevan prácticas de control biológico y cultural.
En resumen, el monitoreo de plagas es una herramienta esencial para garantizar la salud pública y la seguridad alimentaria, al permitir controlar las poblaciones de plagas de forma eficiente y sostenible.