Combatir las plagas en las plantas es vital para su salud y desarrollo óptimo. Las plagas pueden traer consigo enfermedades y daños irreparables si no se controlan a tiempo.
Para prevenir las plagas en las plantas, es fundamental mantener una buena higiene en el jardín. Retirar restos de poda y malas hierbas evitará que las plagas encuentren refugio y se propaguen.
El uso de insecticidas naturales, como el aceite de neem o el extracto de ajo, puede ser una alternativa efectiva y respetuosa con el medio ambiente para combatir las plagas en las plantas.
Además, cultivar plantas aromáticas repelentes, como la lavanda, la menta o la albahaca, ayudará a mantener alejadas a las plagas de forma natural. Estas plantas emiten olores que resultan desagradables para los insectos.
En casos más graves, es recomendable recurrir a profesionales en fumigaciones y control de plagas, quienes podrán identificar la plaga específica y aplicar tratamientos especializados para erradicarla de manera eficiente y segura.